En diciembre de 2005 dos policías detuvieron arbitraria y violentamente a Antonio Zúñiga. «Me agarran, me meten a una patrulla y me dicen '¡tú fuiste, y ya!», recuerda. Nunca le fueron leídos sus derechos y su primer defensor público ni siquiera estaba acreditado para litigar. En sólo dos días el Ministerio Público ejerció la acción penal acusándolo por el delito de asesinato. Al final, un juez lo condenó a 20 años de prisión.
En México, la injusticia está legalizada. No hay forma de salir. Es un sistema que te detiene sin orden de arresto, te acusa sin pruebas y te juzga sin juez, sostiene Roberto Hernández, quien con Layda Negrete («Abogados con Cámara»), decidió tomar una cámara para documentar el aberrante caso de Antonio. El producto, Presunto culpable [2009], espléndido documental que se estrenará en México el 11 febrero de 2011, a través de Cinépolis.
Las ganancias que les corresponden por la venta de boletos Hernández y Negrete las donarán a Fundación Renace, por considerarla «la organización más importante dedicada a la defensa de la gente como TOÑO y también uno de los más firmes partidarios de la reforma de justicia en el país.
Durante 2009 y 2010, Presunto culpable ha sido exhibido alrededor del mundo, obteniendo en el VERZIO International Documentary Film Festival y el Sarajevo Film Festival el Premio del Público.
De acuerdo con una comunicación de «Abogados con Cámara», el que Presunto culpable se exhiba en Cinépolis obedece a la convicción de Alejandro Ramírez, director general de esa cadena, de que dicho documental podría, textualmente,cambiar el sistema de justicia en México.
En 2006, ambos abogados, entonces adscritos al CIDE, presentaron El túnel, un exitoso cortometraje documental que refiere los costos del sistema de justicia inquisitorio para los detenidos, las víctimas, la sociedad y el gobierno, a través de casos paradigmáticos y testimonios que revelan abuso de autoridad, ineficiencia, burocratismo, procedimientos anacrónicos y corrupción.
